Un espacio de energía divina que actúa las 24 horas, equilibrando mente, cuerpo y espíritu. Incluye un Pilar Mental para liberar pensamientos negativos, creencias limitantes y patrones tóxicos, potenciando salud, prosperidad y bienestar integral.
Estar en el Pilar de Luz es entrar en un espacio sagrado y único, donde se recibe energía divina las 24 horas del día.
Esta energía actúa de manera inteligente y amorosa, equilibrando lo que se necesita, incluso aquello que ni se imaginaba que se podía mejorar.
La sanación alcanza mente, cuerpo y espíritu, generando bienestar integral.
El Pilar de Luz es un camino de expansión y transformación, en el que cada persona recibe lo que su Ser necesita, con suavidad y profundidad.
Beneficios y alcance de esta Terapia:
- Alineación energética / equilibrio de chacras
- Limpieza profunda: ayuda a disolver bloqueos emocionales, mentales y espirituales.
- Protección vibracional: genera un campo de luz que resguarda frente a energías densas.
- Equilibrio interior: aporta calma, claridad mental y estabilidad emocional.
- Sanación integral: favorece la liberación de cargas y la recuperación de la vitalidad.
- Conexión espiritual: facilita la comunicación con guías, registros akáshicos y planos de luz.
- Elevación de la frecuencia personal: ayuda a sostener vibraciones más altas en el día a día.
- Expansión de la conciencia: abre la percepción a nuevas comprensiones y a la intuición.
- Fortalecimiento del canal personal despertando o potenciando los dones.
- Bienestar general: se traduce en mayor armonía, confianza y serenidad en la vida diaria.
La propuesta que hago es realizar un tratamiento de 7 días con el Pilar de Luz, permitiendo que esta estructura energética trabaje de manera profunda y sostenida, generando los cambios necesarios para restablecer el equilibrio y la armonía. Y como ya aclaré, en ese periodo se utilizan otras terapias para colaborar en el proceso.
Durante el tratamiento no es necesario que la persona que la recibe realice prácticas especiales ni que permanezca en reposo; lo único que se requiere es su apertura, su voluntad consciente de abrirse a esta sanación permitiendo así que la sanación se manifieste en plenitud.
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